San Cirilo de Jerusalén, 315–386
Día festivo: 18 de marzo

San Cirilo fue un gran maestro. Él vivió en el mismo país que Jesús. Después de hacerse sacerdote, el obispo de Jerusalén le pidió que preparara catecúmenos para el Bautismo. San Cirilo explicó las creencias de la Iglesia a los que querían unirse a ella. Todavía conservamos sus discursos. Ellos nos cuentan cómo las personas se preparaban para el Bautismo en la Iglesia primitiva. También nos cuentan cómo se celebraba la Misa. Años después, cuando él mismo se convirtió en obispo de Jerusalén, continuó dictando estas clases. Él sabía que era muy importante que las personas comprendieran exactamente lo que ocurre cuando se bautizan.

Comenten: Habla acerca de alguna vez que viste un Bautismo.

Actividad
Bautismo
Inteligencia múltiple: Lingüística-verbal; Intrapersonal

Expliquen que San Cirilo de Jerusalén preparaba a las personas para el Bautismo. Señalen que ustedes hicieron varias promesas en nombre de su hijo durante su Bautismo.

• Repasen con su hijo las promesas que hicieron cuando lo bautizaron. Expliquen que cuando alguien es bautizado, los allí reunidos renuevan sus propias promesas bautismales de renunciar al pecado y vivir de acuerdo con la ley del amor.
• Lean cada pregunta que les hicieron durante el Bautismo y luego comenten su significado.

¿Renuncian ustedes a Satanás, a todas sus obras y todas sus seducciones?

¿Creen en Dios, Padre Todopoderoso?

¿Creen en Jesucristo, su único Hijo?

¿Creen en el Espíritu Santo, en la Santa Iglesia Católica, en la Comunión de los Santos, en el perdón de los pecados y en la vida eterna?

• Asuman el papel de líder y oren junto a su hijo las Promesas bautismales que aparecen en la página 412 del Libro del estudiante.